

Lo reconozco. No era mi idea inicial. Es más, nunca me había planteado fotografiar
barandillas. Y ese día tampoco. Pero en un momento determinado se cruzaron en mi encuadre y pasaron a ser las protagonistas. Por arriba, por abajo, por un lado… Lo reconozco. No sabía que podían dar tanto juego unas barandillas. Para mí han sido todo un descubrimiento. Esto me lleva a preguntarme, ¿Cuántas cosas, que vemos todos los días, dejamos de fotografiar pensando que no son interesantes?
4 Comments
Me gusta sobre todo la penúltima!!Pues sí, aquí una que no tiene ni idea de fotografia (aunque me gustaría) y que a veces mira a su alrededor y piiensa: seguro que más de uno sería capaz de sacar cien fotos de todo esto……
Ahí está vuestro don. En ver fotos donde los demás no vemos nada!
Gracias Iria por tu comentario. De todas formas, como he dicho en el texto, muchas veces nosotros llegamos a esas fotos por casualidad, aunque sí es cierto que a vecemos nos fijamos en cosas que otros no lo harían.
Tú las haces interesantes con tus maravillosas fotografías.
No será para tanto Oscar. Al final se trata de prestar atención a esos pequeños detalles y dedicarles un poco de tiempo. Gracias y saludos.